sábado, 4 de febrero de 2012

Lo gris y lo épico

Mucho frío, poco fútbol y una victoria épica. Qué queda de todo eso: tres puntos y los saltos de alegría de algo más de nueve mil aficionados amarillos a los que habría que hacerles un homenaje por su lealtad y su presencia hoy en el Estadio de Gran Canaria. Siempre será gélido y distante ese jodido estadio que solo pudo ser concebido en la mente de un enemigo del fútbol, pero en tardes como la de hoy me gustaría sentar en las gradas a todos los que tuvieron algo que ver con su construcción. Las Palmas no jugó ni bien ni mal. Tampoco el Guadalajara. Sabíamos que era fútbol porque había un balón sobre el césped y veintidós jugadores que corrían de un lado para otro como persiguiendo a sus respectivas sombras. Nosotros mirábamos, silbábamos, aplaudíamos o tuiteábamos el partido. Marcó Las Palmas, luego empató el Guadalajara y más tarde se adelantó el equipo alcarreño. Llegamos así al último minuto del partido. A partir de ahí se sucedieron esas circunstancias que seguirán haciendo grande al fútbol. Empatamos de penalti y luego, en apenas cinco minutos, tuvimos más oportunidades que en todo el partido. Fuimos fallando ocasiones hasta que nos vimos con una falta a favor al borde del área. Apareció Viera –menos mal que estaba Viera y que no lo vimos vestido de rojiblanco este fin de semana-,miró al horizonte, cogió carrerilla y logró el tanto de la victoria después de que el balón chocara en el poste y en la espalda del portero. Fue uno de esos goles que casi entran más por el empuje de la grada que por la propia potencia del disparo. El final fue, salvando las distancias, como aquel partido entre el Bayern y el Manchester United de la Liga de Campeones jugado en el Nou Camp. Nos olvidaremos de la desidia, de los fallos en los pases y de la falta de ambición amarilla. Lo que quedará de este encuentro será el estruendo y el salto de casi diez mil espectadores celebrando el gol de la victoria. A veces el fútbol no es más que un minuto de gloria, un grito que espanta todas las tensiones de la semana, un gol que cuando resuena se confunde con todos los grandes goles que nos han levantado alguna vez de nuestros asientos. Tocaba ganar para alejarnos de los puestos de descenso. Ahora nos movemos en una bendita tierra de nadie desde la que podemos volver a mirar hacia arriba. Ni somos tan buenos como hace un par de meses, ni tan malos como la pasada semana en Alcorcón. Lo importante es siempre ser y seguir estando. Y si tenemos a Jonathan Viera la conjugación de ambos verbos se vuelve más relajada y victoriosa. Hacía frío y todo era gris, tanto el juego como el cielo; pero bastaron unos minutos alejados de las tácticas y las lógicas para que volviéramos a seguir creyendo en el fútbol y en la épica que lo engrandece y lo mantiene a salvo de las especulaciones y de los representantes.

4 comentarios:

  1. Pues si Santiago, un pelete que no veas el que hacía en el Gran Canaria. El Guadalajara a mí sí que me gustó pero las piernas le flojearon en los últimos 20 minutos. Miedo a ganar se le suele llamar. Las Palmas un desastre, pero coincido con Juan Manuel en que las ocasiones de gol que crea La UD en casa no se ven en ningún otro equipo del fútbol profesional. El final fue de película. Ojalá que ese fútbol-negocio llenó de representantes y buitres que hay ahora haga entrar en razón a Jonathan y renueve, bien para que se quede (sería lo ideal) o por lo menos para que el club que lo formó como futbolista no se quede con una mano delante y otra detrás, ya que si su hipotética salida no dejara un dinero razonable, quizás Las Palmas se vería obligada a vender a otros jugadores al margen de Viera. Muy descriptivo tu recuerdo de la Final entre el Bayern Munich y el Manchester United en el Camp Nou. Anoche solo faltó Collina recogiendo del suelo a los futbolistas del Guadalajara. Un abrazo.

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  2. Ojalá aciertes con lo de Viera, Bryan. Un fuerte abrazo

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  3. Genial el blog. Enhorabuena te dejo un enlace al que he creado, por tener otras visiones de lo mismo.

    El Ángulo Opuesto

    Saludos.

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  4. Magnífico blog, lo incluyo en los enlaces de Juego entre líneas. Un abrazo

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